Receta tradicional de un clásico de nuestra comida. Algo laboriosa pero sana, completa y deliciosa.
Esta receta la cociné a petición de mi familia para un día que tocaba una comida algo especial. Precedida de un pica-pica, acabó resultando un éxito. Además, con el relleno que sobró, le añadí arroz blanco y tuve resuelta la comida del día siguiente.
Ingredientes:
– 3 berenjenas grandecitas
– 500 gr de carne picada mixta (50% cerdo 50% vacuno)
– Un pimiento rojo
– Dos pimientos verdes italianos
– Una cebolla grande
– Salsa de tomate frita
– Nata para cocinar, en tetrabrik pequeño
– Mozzarela
– Sal, pimienta y aceite
Procedimiento:
Lavamos las berenjenas. Las cortamos por la mitad y les hacemos unos cortes en el interior tanto horizontales como verticales, sin llegar a tocar la piel. Horneamos a 200º hasta que las berenjenas estén blandas, (entre 20 y 30 minutos).
Una vez frías, las vaciamos con la ayuda de una cuchara.
Cortamos en brunoise los pimientos, previamente lavados y despepitados, la cebolla y el interior de las berenjenas. Sofreímos hasta que estén blandos. Reservamos.
Doramos la carne picada hasta que este marron claro. No hace falta hacerla mucho.
A la carne le añadimos las verduras y removemos. Añadimos la nata y tres o cuatro cucharadas de tomate frito. Dejamos reducir y corregimos de sal. Reservamos.
Disponemos las berenjenas en la bandeja del horno. Las rellenamos generosamente con la mezcla anterior y las cubrimos con mozzarella (o el queso que queramos). Gratinamos en el horno hasta que se funda el queso.
¡Eso es todo!